Los productos reacondicionados, según lo indicado por GeekMarket, resultan más sostenibles para el medioambiente.
Los móviles reacondicionados se han convertido en una de las mejores opciones para reducir la basura tecnológica, que crece a un ritmo exorbitante, generando emisiones de CO₂ equivalentes a la fabricación de 1.000 coches. La principal causa de la llamada e-waste, la basura tecnológica, es el recambio constante de móviles por parte de los usuarios.
Los usuarios renuevan, de media, su teléfono móvil cada dos años. El más mínimo fallo y el deseo de contar con el último modelo es la excusa perfecta para adquirir un nuevo smartphone. Con todo el coste medioambiental que ello implica. Cada año, 20 millones de teléfonos son descartados, según un reciente estudio sobre reciclabilidad de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos.
Esta compra puede resultar inocente pero tiene un trasfondo poco sostenible. La fabricación de un teléfono móvil genera 55 kilos de emisiones de CO₂. Por lo tanto, en 20 años una persona habrá generado 550 kilos de CO₂, si se suman todos los móviles comprados durante este periodo de tiempo.
Frente a este contexto, las propuestas tecno ecológicas y sostenibles, como los móviles reacondicionados, se perfilan como una de las mejores opciones. La startup española GeekMarket nació en abril del 2022 con un claro objetivo: hacer llegar productos tecnológicos reacondicionados a todo el mundo. Al mismo tiempo, el usuario recibe un producto de calidad a un precio más asequible.

GeekMarket y su propuesta de móviles reutilizables
«Nos encanta la tecnología, pero queríamos encontrar una solución para poder disfrutar y consumirla de una forma más sostenible y los productos reacondicionados se ajustan a esta necesidad: productos de primera calidad con menor huella medioambiental», afirman desde GeekMarket.
Los dispositivos reacondicionados son móviles, ordenadores, tablets o relojes inteligentes que han sido reparados para que funcionen como el primer día para que tengan una segunda oportunidad.
Esta alternativa tecnológica soluciona tres problemas: la velocidad con la que crece el precio de los productos tecnológicos por sobre el poder adquisitivo de los ciudadanos. El ciclo de renovación de la tecnología y el impacto medioambiental de los desechos tecnológicos. Mientras que la fabricación de un smartphone nuevo genera 55 kg de CO₂, un móvil reacondicionado produce solo 6 kg de CO₂ en todo su proceso de reparación.
Los móviles reacondicionados son para el medio ambiente una respuesta eficaz con la que reducir las emisiones de carbono. Y para el usuario la oportunidad de poder acceder a modelos actuales por precios asequibles.
Por último, el mercado de los móviles reacondicionados es una respuesta eficaz a la basura tecnológica. Más del 80% de los móviles desechados aún funcionan perfectamente cuando los usuarios se deshacen de ellos.